La cosecha de aceitunas en Silvanus’ Geheimnis es un proceso que refleja nuestra dedicación a la calidad. No nos conformamos con la producción masiva ni con métodos que comprometan las propiedades del aceite. En lugar de eso, realizamos una cosecha selectiva, donde cada aceituna es recolectada del árbol en el momento perfecto de maduración. Esto garantiza que solo las mejores aceitunas, en su punto óptimo, sean utilizadas para la producción de nuestro aceite de oliva virgen extra.
Este proceso es posible gracias a la conexión que tenemos con la tierra. Nuestros olivares están ubicados en un entorno privilegiado, en la comarca de La Mancha, cerca del enclave arqueológico de Segóbriga, un lugar cargado de historia. Aquí, el clima y el suelo crean las condiciones perfectas para cultivar olivos que producen aceitunas de la más alta calidad. Sin embargo, la naturaleza no es suficiente por sí sola. La experiencia y el conocimiento de generaciones pasadas nos han enseñado a identificar las aceitunas que deben ser recogidas y las que pueden esperar, lo que garantiza que el aceite que producimos es único y tiene un sabor inconfundible.
La cosecha selectiva no solo es una cuestión de calidad, sino también de respeto hacia el medio ambiente. Nuestros métodos de cultivo y cosechado de las aceitunas, son respetuosos con los olivos y garantizan el mantenimiento de la biodiversidad en el ecosistema de nuestros campos. Este enfoque permite que nuestros olivares sigan siendo productivos durante muchos años, además de preservar la fauna y flora local, garantizando que futuras generaciones puedan disfrutar de un aceite tan exclusivo y delicioso como el que producimos hoy y del entorno en el que se cultiva.